Previo GP de Hungría - Consideraciones técnicasEl calor complica la conducción de los pilotos
Hungaroring es un circuito que ofrece numerosos desafíos tanto para los pilotos como para los ingenieros. No cuenta con ninguna curva de alta velocidad, lo que lleva a los equipos a correr con la mayor carga aerodinámica posible en los coches, mientras que la principal preocupación para el departamento de motor es asegurar una buena refrigeración en una carrera que suele disputarse con temperaturas muy altas.
El calor también complica las cosas para los pilotos, que necesitan estar en una excelente forma física para poder soportar las 70 vueltas de una carrera en la que apenas hay respiro.
En el aspecto
aerodinámico, en este circuito se utiliza un sistema parecido al de Mónaco. Los reglajes van destinados a optimizar la velocidad en curva, la frenada y la tracción.
Los
neumáticos que se utilizarán serán de compuesto blando y super-blando; los principales motivos son la escasa velocidad y la necesidad de un buen agarre para las aceleraciones y las curvas.
Debido a las altas temperaturas y a la prácticamente ausencia de velocidad, la
refrigeración también es un dato a tener en cuenta y hay que arreglarlo con ajustes aerodinámicos, pero intentando que estos ajustes no afecten demasiado al rendimiento del coche.
El
motor no se verá excesivamente perjudicado, ya que "sólo" se va a fondo en la mitad del recorrido.
Info: www.thef1.com