Fernando Alonso consiguió en el Gran Premio de Japón, antepenúltima prueba del Mundial de Fórmula 1, su segunda victoria consecutiva de la temporada. Robert Kubica y Kimi Raikkonen acompañaron al piloto de Renault en el podio, mientras que Felipe Massa fue séptimo y Lewis Hamilton, protagonista de una pésima salida, duodécimo. Con estos resultados, Hamilton se mantiene líder del campeonato a falta de las carreras de China y Brasil, pero ahora con sólo cinco puntos de ventaja sobre Massa.
La carrera quedó sentenciada en la salida. Hamilton, que partía desde la pole, perdió varios puestos y luego se pasó de frenada, llevándose con él a los dos pilotos de Ferrari, Raikkonen y Massa, circunstancia que aprovecharon Kubica y Alonso para ponerse en cabeza. Poco después, Massa colisionó con Hamilton, que se quedó cruzado en la pista y tuvo que anticipar su primera entrada en boxes. Ambos fueron sancionados, el brasileño por este incidente y Lewis por el de la salida.
Sanción a Bourdais
No fue la única colisión en al que estuvo implicado Massa, ya que en las postrimerías de la carrera, cuando era con diferencia el piloto más rápido de la pista, fue embestido por Bourdais. El piloto de Toro Rosso fue penalizado con 25 segundos al término del Gran Premio y pasó del sexto al décimo puesto de la clasificación, lo que le permitió a Felipe ganar una posición y, con ello, un punto más que puede ser valiosísimo en la lucha por el título.
Otra clave estuvo en el primer repostaje, del que Alonso salió más descargado que Kubica, circunstancia que le permitió cobrar ventaja vuelta a vuelta con el polaco hasta el segundo. El piloto de BMW entró en boxes después que el español, pero ya no pudo enjugar la distancia conseguida por Fernando, que cimentó en esta estrategia su segunda victoria consecutiva.
Piquet redondeó la fiesta
Mención especial merece también la actuación del compañero de Alonso, Nelson Piquet, que llegó a liderar la carrera y tuvo opciones de podio hasta el final, cuando libró un intenso duelo con Raikkonen. Sin embargo, el brasileño tuvo problemas y entró en meta cuarto, completando con ello la mejor actuación en la presente temporada del equipo Renault, que deja virtualmente sentenciado el título de marcas.
La cruz de la jornada fue, sin duda, para McLaren, ya que Kovalainen se retiró con el motor roto, una avería infrecuente en la escuadra angloalemana, y Hamilton fue el protagonista de los incidentes ya mencionados, entrando duodécimo y desdoblándose en la última vuelta de Alonso, que no entró al trapo. El inglés se precipitó en la salida y recordó al piloto que acumuló errores en los últimos dos grandes premios de 2008.