No sabía cómo titular este último arreglo,pero tocando madera y que me de algunos años más,si también me los respetan desde la autoridad y la culona claro. Tenía muchos humos y una falta de potencia momentánea...la suerte que di con un mecánico que le gusta su trabajo y ha trasteado este bendito motor en un Saab y le dio bastante experiencia.
Arreglo: los humos y perdida de potencia (indirectamente) venían de la rotura del depresior de frenos ( lo cantó) por excesivo aceite en el sensor del turbo,hacía que la geometría del turbo no abriera del todo,más unos cambios de manguitos de vacío,por si acaso, creo que se ha quedado nueva,hasta la próxima.
No me ha costado mucho,ya que el depresior de desguace,no es una pieza que se suela ir dice el mecánico, y los tubos de vacío 3 euros, más la ayuda del amigo Rafael de aquí del foro,que siempre está para hacharme una mano y le debo unos mantecados
, tiramos para adelante .
