Bueno, mal de muchos, consuelo de tontos. Os cuento mi problema (que creo que os sonará...) para que me añadáis a la lista de protesta contra Renault, y para que me aconsejéis:
-Hace cinco años compré una Grand Espace III de segunda mano, en concesionario oficial Renault, con 4.000 km. Al año, en mis vacaciones en Francia, avería por falta de potencia y humo negro. La llevo al taller, me la reparan y me informan de que en realidad el coche tenía 64.000 km...Vuelta a España con un cabreo de dos pares de narices, y reclamación al canto, con cartita al presidente de Renault España incluida.
Resultado: consigo que me cambien el vehículo, por una Grand Espace IV Privilege, con el fatídico motor 2.2 DCI de 110 CV. Hasta ahora, todo bien (aparte de la guantera que se levanta por el calor, y dos OTS por problemas del pedal del embrague, que se quedaba pillado).
A finales de junio 2008, le hago la revisión de los 120.000 km: cambio de correa, filtros...1.100 €.
El 20/8/08 vuelvo de vacaciones de Francia, con cinco niños y esposa, dos maletas, y un cofre de techo hasta los topes. Total de kilómetros hechos en vacaciones: 7.500. Llegando a Madrid, después de quince horas de viaje, se me enciende el pilotito de "anomalía de inyección", y el coche se me viene abajo. Sigo circulando a 60 Km. hasta que el cohce empieza de nuevo a responder. Nunca me había pasado hasta ahora.
Por la mañana, y antes de continuar viaje hasta Huelva, me paso por un taller Renault, le meten la maletita mágica, y me dicen que es problema de aire en el colector de admisión, y que puedo llegar a Huelva, pero sin forzar mucho.
Al día siguiente, Madrid-Huelva a 100 km./h. Todo bien hasta que, a la entrada de un tunel con fuerte pendiente cuesta arriba, y en obras, me toca reducir marchas, y se me enciende otra vez la anomalía de inyección.
Lo he llevado al taller de un conocido, y le han aparecido tres averías: dos del caudalímetro, y otra por excesiva presión en el turbo. Brujuleando por este magnífico foro, descubro que mi problema es muy común entre los propietarios de una Espace. El del taller me ha dicho que pruebe el coche estos días, forzándolo de revoluciones, y dándole un poco de caña, para ver si vuelve a saltar el pilotito.
Pero, visto lo que contáis por aquí, ¿me merece realmente la pena reparar algo que me va a seguir dando problemas, y que parece que no tiene solución?
Por otro lado, vuestra iniciativa es magnífica. ¿Qué datos hacen falta para apuntarse, y a quién se los paso?
Un abrazo,
José Antonio